Imagine que usted es el director de marca de una de las enseñas de champán francés más emblemáticas y con mas renombre, una marca originalmente proveedora de la corte imperial rusa, una marca cuyos clientes aprecian la elegancia, el prestigio, la tradición y el lujo más refinado. Un buen día se levanta, enciende la televisión y ve un vídeo de una estrella norteamericana del hip-hop, llenito de cadenas de oro, encima de un carro Corvette descapotable y portando dos botellas de su champán en cada mano. ¿Qué haría usted si su marca estuviera fuera de control?

Esto mismo ocurrió hace poco con la ultra-conocida marca de champán Cristal, perteneciente a la casa Louis Roederer: Cristal ha recibido una inusitada atención de los medios de comunicación estadounidenses tras ser adoptada por la rutilante comunidad de estrellas del hip-hop como un símbolo de estatus. Artistas como Jay-Z citan la marca Cristal en sus canciones y aparecen en los videoclips lubricando los cuerpos de una cohorte de bailarinas con el preciado líquido a 350 dólares la botella. Cristal Champagne de Louis Roederer, fue la octava marca más mencionada en las listas de éxitos de los EEUU, junto a otras como Mercedes Benz, Nike, Hennessy, Louis Vuitton, Rolls-Royce, Bentley, Cadillac y AK-47.